Culiacán, Sinaloa.- “La reforma a la Ley Orgánica de la UAS viene a romper cualquier cacicazgo que hubiera al interior de la Universidad”, sostuvo el diputado del Grupo Plural Adolfo Beltrán Corrales, presidente de la Comisión de Educación, Ciencia y Tecnología del Congreso del Estado de Sinaloa.

Destacó que la democracia plena en la elección de las autoridades universitarias reforzará la autonomía universitaria porque la mejor manera de darle legitimidad al Rector o Rectora es el voto de la Comunidad Universitaria.

“El Rector o Rectora tendrá que trabajar para esa Comunidad y no en favor de intereses ajenos”, dijo. “En los últimos años obedecían más a otros intereses que a la propia Comunidad Universitaria”.

En el marco del programa El Congreso Informa recordó que el Poder Legislativo tenía la obligación desde 2021 de armonizar la Ley Orgánica de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) con la Ley General de Educación Superior, así como las leyes orgánicas de todas las universidades autónomas en la entidad.

Al hacer una detallada relatoría del proceso legislativo resaltó como temas sustanciales de la reforma el democratizar la elección de las autoridades universitarias a través del voto libre, directo y secreto, la paridad de género, la paridad universitaria y la gratuidad de la educación.

Aclaró que no habrá campañas en la elección de las autoridades de la UAS a través de la Comunidad Universitaria, sino que se llevarán a cabo comparecencias al interior de las Unidades Académicas de manera ordenada.

Enfatizó que la educación que imparta la UAS deberá ser gratuita sin condición a pago de inscripción y pago de ninguna naturaleza. “Esta gratuidad será aplicada de manera gradual a medida de que se vayan supliendo esos recursos que dejaría de captar. En un par de años pudiéramos tener una gratuidad absoluta”, dijo.

Sobre la paridad de género explicó que ahora por obligación si es Rector, tendrá que ser Secretaria General, y si es Rectora tendrá que ser Secretario General para que exista alternancia de género, y en direcciones también tendrá que darse paridad entre hombres y mujeres.

De igual manera, asentó, la integración del Consejo Universitario deberá de ser con paridad de género, mitad hombres, mitad mujeres, pero también paridad universitaria, mitad alumnos, mitad maestros para que haya una representación plena en términos concretos. “Se permite la reelección del Rector o Rectora”, apuntó.

El diputado Adolfo Beltrán Corrales dijo que recientemente hubo elecciones ejemplares en la Universidad Autónoma de Occidente, primera institución que armonizó su Ley Orgánica. “La Comunidad Universitaria decidió de manera libre el rumbo que quieren dar a la Universidad”, dijo.

Explicó que una vez renovado el Consejo Universitario, deberá lanzar la Convocatoria para la elección del nuevo Rector o Rectora en el mes de abril, y en 30 días llevar el proceso de elección para que el 8 de junio de 2025 tenga la UAS nueva autoridad elegida de forma democrática por la Comunidad Universitaria.

En el caso de las direcciones, las nuevas autoridades serán elegidas de manera democrática por la Comunidad Universitaria una vez que concluyan los períodos de las directoras o directores electos bajo la ley anterior. “Lo mismo va a suceder con las y los estudiantes integrantes del Consejo Universitario”, dijo.

Aseveró que el Congreso de Sinaloa hizo la reforma a la Ley Orgánica de la UAS cuidando el proceso legislativo, por lo que ninguna impugnación podrá prosperar.

Desde el 20 de septiembre el documento de reforma fue turnado al Ejecutivo del Estado, y cobrará vigencia al día siguiente de su publicación.

El objetivo de democratizar a la UAS es que las nuevas autoridades trabajen y le rinden cuentas a la Comunidad Universitaria, no a intereses ajenos.

Finalmente, señaló que durante el proceso siempre se buscó el acercamiento, el diálogo y la participación de las autoridades universitarias, pero el Congreso del Estado siempre fue ignorado.

“Les pedimos su opinión, les pedimos que ellos presentaran alguna iniciativa, ellos nunca nos escucharon, nunca nos respondieron”, lamentó. “Les pedimos a las autoridades universitarias que ellos llevaran a cabo la Consulta, fuimos ignorados”.

Por esa razón el Congreso de Sinaloa tuvo que cumplir con su atribución legal de legislar y por las circunstancias se tuvo que hacer en una sede alterna.