Culiacán, Sinaloa.- No hay indicios de que se repitan eventos violentos en Culiacán tras los incidentes ocurridos en la zona norte este jueves, afirmó el gobernador Rubén Rocha Moya. En respuesta a la incertidumbre de los padres de familia, el mandatario confirmó que no se suspenderán las clases para el viernes 30 de agosto.
En entrevista, Rocha Moya fue enfático al señalar que, después de un recorrido de las autoridades de seguridad de los tres niveles de gobierno por la capital del estado, se ha determinado que existen condiciones para que la ciudadanía continúe con sus actividades normales.
Cuando se le preguntó sobre la suspensión de clases, el gobernador respondió: “Sí, claro que sí. No se suspenden las clases, no hay una razón para que eso ocurra. La normalidad continúa, no hay ningún elemento que nos haga dudar que las cosas van a estar tranquilas, nosotros vamos a estar atentos en coordinación con todas las fuerzas (de seguridad)”.
El gobernador reiteró su llamado a los ciudadanos de Culiacán a mantener la calma. Las autoridades continúan con la estrategia de seguridad antes y después de los hechos violentos, que se concentraron fuera de la zona urbana, en comunidades como Limón de los Ramos y Jesús María.
En cuanto a los incidentes en la zona norte, Rocha Moya aclaró que no hubo mayores consecuencias. El único reporte significativo fue un elemento de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) que resultó herido debido a una volcadura en Jesús María.
Respecto a las unidades incendiadas, el gobernador informó que el fuego ya fue controlado y que el personal de seguridad está trabajando en el retiro de los vehículos afectados para liberar la carretera. Hasta el momento, el saldo es de daños materiales y no se reportan civiles heridos.
Rocha Moya concluyó reiterando que no hay nada que ponga en riesgo la seguridad de los habitantes de Culiacán y que no existen elementos que sugieran la posibilidad de más hechos violentos de tal magnitud.